12 de mayo de 2017/Pedro Morales
Pese a que a que ya transcurrieron cuatro meses de la actual administración estatal, el asunto legal de la Central de Abastos de Tlaxcala no se ha finiquitado, aunque es considerado “inexistente”, las ruinas de lo que serían las naves muestran que se trata de un “elefante blanco”.
Ezequiel Zamora Morillón, Delfino Morales Morales y Hermilo Castillo Vázquez, vecinos de la cabecera municipal de Xaltocan, mostraron que las ruinas siguen en el mismo lugar, sin avance y sin solución.
“Nos extraña que se diga que legalmente estas instalaciones no existan, ya que son visibles para todo el mundo al paso de la carretera a Calpulalpan, cada día la maleza gana terreno, lo que eran las vialidades ya se las llevó el agua y tienden a convertirse en barrancas”.
Zamora Morillón comentó que de esta forma, “se han cerrado las puertas del desarrollo y de un significativo ahorro para las familias tlaxcaltecas, quienes de esta forma ya no pagarían el arrastre de productos de primera necesidad.
Por cuestiones legales, la obra fue detenida desde el inicio de la pasada administración estatal, sin tomar en cuenta que esta central de abastos es vital para la región de Puebla, Veracruz, Hidalgo y Tlaxcala, ya que de esta forma los productos agrícolas tendrían otro costo.
Delfino Morales Morales agregó que además de que sería un verdadero polo de desarrollo al captar millones y millones de pesos que de otra forma ahora mismo van a dar a parar a Puebla o al Distrito Federal, francamente se ha negado el progreso a los tlaxcaltecas.
Consideró que la Central de Abastos del estado que llevaba avance de alrededor de 40 espacios, se encuentra en total abandono y visiblemente deteriorada, luego de que su construcción fue detenida por cuestiones legales.
“El proyecto de construcción fue inaugurado por el ex mandatario Héctor Ortiz y cancelada por Mariano González, al encontrar supuestas inconsistencias en la edificación del inmueble, ubicado en el municipio de Xaltocan”.
Hermilo Castillo Vázquez dijo que en Xaltocan se sabe que ante esta situación, el grupo de la industria de la Construcción “Orión” anunció que demandaría al gobierno de Tlaxcala, por abuso de autoridad, daños y perjuicios.
Luego de la obra de la Central de Abastos de Tlaxcala (CAT) fue cancelada y en la que ya se habían invertido por lo menos 175 millones de pesos.
Asegura que Hugo Hernández Monteón, representante de la empresa, informó a la población y a las autoridades del municipio que procedieron penalmente, para deslindar responsabilidades.
El inmueble, costaría a la empresa regiomontana de 350 millones de pesos y construirían en 18 hectáreas, más de 30 mil metros cuadrados.
Contaría con 228 bodegas; 36 destinadas a lácteos, 50 para abarrotes, 114 para frutas, 28 que tendrían productos cárnicos y 52 locales comerciales.
“Es la hora que ya transcurren cuatro meses de este gobierno y la central ni siquiera está en obra negra, la soledad campea en el lugar, la maleza y las lagartijas son las que habitan, las vialidades están dañadas”.
Mientras el comercio debe seguir su abastecimiento en Puebla o el Distrito Federal, “al momento se nota que no hay voluntad por mejorar las condiciones de Tlaxcala, este botón es una muestra de ello”, concluyeron.