Banco Mundial ajusta a la baja perspectivas de crecimiento global por inestabilidad geopolítica
Economía. A 09 de Enero, 2024. ✍️ Sunashi Rivera
En su último informe de Perspectivas Económicas Globales, el Banco Mundial mantiene la previsión de crecimiento global en un modesto 2.4% para 2024, pero baja tres décimas su estimación para 2025, situándola en el 2.7%. Este ajuste se atribuye a la caída del comercio mundial, los altos tipos de interés y la creciente inestabilidad geopolítica, que amenaza con debilitar aún más el crecimiento económico.
El economista jefe del banco, Indermit Gill, señaló en una llamada con medios que, aunque se controla la inflación mundial sin precipitar una recesión, el panorama futuro es sombrío. La economía global ha mostrado resistencia, incluso mejorando las proyecciones de crecimiento para 2023 en cinco décimas, alcanzando un 2.6%.
No obstante, hacia finales de 2024, se prevé un «lamentable récord»: el lustro de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) global más lento en 30 años. A pesar de la resistencia económica ante una «avalancha de shocks», el Banco Mundial alerta sobre el persistente panorama desafiante.
Las economías avanzadas experimentarán un crecimiento del 1.2% este año, manteniéndose constante respecto a las estimaciones anteriores, pero disminuirán seis décimas en 2025, alcanzando el 1.6%. La zona euro y Estados Unidos también se verán afectados, con previsiones ajustadas a la baja.
En cuanto a las economías emergentes, se espera un crecimiento del 3.9% en 2024 y 4% en 2025, marcando una significativa desaceleración desde el 7% registrado en 2021. América Latina y el Caribe, por su parte, registrarán un crecimiento del 2.3% en 2024 y 2.5% en 2025, con expectativas ajustadas pero con señales de mejoría.
La potencia emergente, China, continuará ralentizando su crecimiento, con estimaciones de 4.5% en 2024 y 4.3% en 2025, una décima menos de lo proyectado anteriormente. El Banco Mundial señala la esperanza de que el lastre económico debido al endurecimiento previo de la política monetaria disminuya a lo largo de 2024.
En resumen, la combinación de factores globales presenta un escenario desafiante para el crecimiento económico mundial, requiriendo una atención cuidadosa para abordar los riesgos emergentes y garantizar la estabilidad financiera a largo plazo.
Fuente: Forbes.
