Olfato y mortalidad: cinco olores clave como indicadores de salud
a 13 Abril 2024.Lizeth Cuahutle
El olfato, un sentido a menudo subestimado, tiene una capacidad sorprendente para evocar recuerdos y emociones. Según una encuesta de 2015 realizada por la revista The Atlantic, la mayoría de las personas preferirían renunciar a su sentido del olfato antes que separarse de su smartphone. Esto sugiere que no valoramos suficientemente nuestro sentido del olfato.
Aunque nuestros ojos pueden distinguir varios millones de colores y nuestros oídos pueden percibir tonos distintos, la nariz supera a ambos sentidos. Contiene alrededor de 400 tipos de receptores olfativos, capaces de traducir las aproximadamente 40,000 millones de moléculas olorosas en una amplia variedad de olores que nuestro cerebro puede comprender.
Los recuerdos relacionados con el olfato tienen una fuerte carga emocional y pueden activar recuerdos lejanos de la infancia, ya sean agradables o desagradables. De hecho, un 35% de lo que olemos, en comparación con el 1% de lo que tocamos, el 2% de lo que oímos, el 5% de lo que vemos y el 15% de lo que probamos.
El marketing olfativo, que utiliza aromas específicos para influir en las emociones y el comportamiento de los consumidores, ha ganado popularidad en los últimos años. Las empresas están empezando a incluir su aroma corporativo en su imagen corporativa para crear una experiencia sensorial única para sus clientes.
La complejidad de los aromas es fascinante. Por ejemplo, un plátano contiene 300 sustancias aromáticas, los tomates 400 y el café no menos de 600. La construcción de un aroma es extremadamente compleja, y aún no comprendemos completamente cómo ciertas combinaciones de sustancias químicas producen aromas específicos.
La pérdida del sentido del olfato puede ser un indicador precoz de fallecimiento en personas mayores. Un estudio realizado por la Universidad de Chicago encontró que aquellos que no podían identificar ciertos olores tenían más probabilidades de fallecer cinco años después. Esto sugiere que el sentido del olfato puede ser un sistema de alerta temprana para identificar a pacientes con mayor riesgo de fallecer.