El Caldo de Rata, polémico y tradicional
17 de mayo de 2024 // Por: Isaura Corona Osorio
En las regiones norteñas de México, un platillo ancestral ha resurgido, capturando tanto la curiosidad como el paladar de los locales y visitantes: el caldo de rata. Este plato, que para muchos puede sonar poco convencional, es considerado un manjar por los habitantes de áreas como Zacatecas y San Luis Potosí, donde la tradición culinaria se entrelaza con la historia y la salud.
Con raíces que se hunden en la cocina tradicional de ciertas comunidades, este plato se elabora con carne de rata de campo, conocida por su sabor que recuerda al pollo y al conejo, con un toque terroso distintivo. La preparación involucra una cuidadosa limpieza y cocción lenta junto con verduras frescas como jitomate, cebolla, ajo, zanahoria, chayote y papa, a veces acompañadas de chile serrano, elote o ejotes para realzar el sabor.
Según estudios, la carne de rata de campo es rica en minerales como cobre, zinc y fósforo, así como en potasio y hierro, nutrientes esenciales para la salud humana.
En García, un pueblo cercano a Monterrey, se le considera un manjar y se le atribuyen beneficios para la salud, como la reducción de la ansiedad y la hinchazón, aunque estos efectos no cuentan con respaldo médico comprobado.