CDMX/15 /OCTUBRE/2020
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, envió una carta al diario británico Financial Times en la que rechaza la etiqueta de dictador en contra el presidente López Obrador, tras una editorial del medio.
Explicó que la consulta popular sobre el juicio a expresidentes no se trata de la voluntad de un solo hombre, refiriéndose al presidente mexicano.
“Frente a las decisiones más importantes, López Obrador confía en la voluntad del pueblo”, dijo.
“La iniciativa del presidente tiene como objetivo preguntar a nuestros ciudadanos si los cinco presidentes anteriores deberían ser investigados y, eventualmente, procesados, en seguimiento a nuestras leyes. Sin embargo, la Suprema Corte cambió la pregunta y eliminó toda referencia a los expresidentes”, señaló.
Expuso que en el pasado reciente, en México ha habido gobiernos corruptos a los que se ha acusado de financiar campañas políticas con sobornos y de proteger a organizaciones de tráfico de drogas.
“Antes, rara vez se hacía justicia y, cuando se hacía, respondía principalmente a los intereses y pactos de las élites”, resaltó.
Ebrard indicó que la iniciativa para la consulta abre una nueva era en la que la voluntad del pueblo es respetada y tomada en cuenta.
Defendió que la encuesta sigue los mecanismos institucionales mexicanos a través del escrutinio de los órganos legislativos y judiciales del país.
“Como en cualquier democracia sólida, el pueblo no debe temer al gobierno, sino el gobierno debe temer al escrutinio de su pueblo.
Al respetar el estado de derecho y empoderar a la gente, estamos profundizando nuestra democracia, una en la que nuestros ciudadanos tendrán la última palabra”, finaliza la misiva.
López Obrador, el nuevo dictador de América Latina, asegura Financial Times
El diario afirmó en su editorial del pasado 4 de octubre que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, es el nuevo líder autoritario de América Latina y consideró que es “tan intolerante” que el país “corre el riesgo de volver a caer en un pasado más pobre, oscuro y represivo, habitado por los caudillos autoritarios que la región esperaba haber dejado atrás”.
El texto señala una concentración de poder del Ejecutivo federal y cuestiona la “lealtad ciega” que este exige a sus colaboradores; además de que avergüenza públicamente a quienes lo critican.
Agrega que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) es la última institución en alinearse a la voluntad del presidente “populista” al aprobar su propuesta de consulta para enjuiciar a expresidentes.
La mayoría de las decisiones importantes son solo suyas. Las instituciones que se niegan a acatar su voluntad son hostigadas, asegura.
Financial Times refirió que el gobierno de México no tolera las expresiones de periodistas o ambientalistas que critican sus proyectos de infraestructura, a los que usualmente llama corruptos que “están al servicio de regímenes pasados”.
También cuestiona la decisión de su gobierno de favorecer los combustibles fósiles sobre las energías renovables y a Petróleos Mexicanos (Pemex) sobre el sector privado
Considera también que su administración está despilfarrando la “oportunidad de oro” que significa el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para atraer a empresas estadounidenses que regresan de China.
Todas estas medidas, dice Financial Times, suceden en un país cuya democracia y órganos públicos ya eran débiles, “legado de años de poder presidencial sin límites y de predominio de un solo partido político”.