CDMX.- 10 de mayo de 2017
La muerte sorprendió a “El Abuelo” cuando este indigente dormía en un camellón de Avenida Insurgentes; el señor se encontraba entre un árbol y las escaleras de un puente peatonal, a su alrededor había botellas de plástico y cubriéndole su pie izquierdo, una cobija que utilizaba durante las noches para resistir las inclemencias del tiempo; pero ayer su corazón se detuvo.
En un recorrido realizado por elementos de la SSP CDMX, se les informó que frente a una de las salidas de la plaza comercial Forum Buenavista, se encontraba una persona en situación de calles sin vida. Al acudir a revisar el lugar, se percataron que ese hombre no respiraba, y como inicialmente se había recibido una llamada al 911 de que un adulto mayor estaba inconsciente, se presentaron en el sitio los paramédicos.
Vieron la demacrada cara del señor, y sin lograr asegurar, porque la exactitud de la muerte se debe hacer con la necropsia de ley, señalaron que una de las posibles causas pudo ser un problema al corazón, y se retiraron del sitio, porque no podían hacer más por ese hombre, entonces se le dio aviso al ministerio público para que fuera a ver lo ocurrido y ordenar el levantamiento del cadáver.
Una persona en situación de calle o del llamado “escuadrón de la muerte”, solamente atinó a decir, que este hombre respondía bajo el mote de “El Abuelo”, y que ya llevaba varios años deambulando por las calles de la Colonia Santa María la Ribera, que se encuentra cruzando Insurgentes, y que llevaba varios días durmiendo en el lugar donde lo sorprendió la muerte.
Concluidas las primeras diligencias, el señor, quien utilizaba una bolsa como guardaequipaje y almohada, fue subido a la camioneta de Servicios Periciales, y bajo el puente quedaron las bolsas y botellas, que hasta ayer por la mañana, representaban para él sus objetos más valiosos.