TLAXCALA ES LA SEGUNDA ENTIDAD MÁS PACÍFICA DEL PAÍS: ÍNDICE DE PAZ MÉXICO 2022
*Yucatán se mantiene como el estado más pacífico de México, seguido de Tlaxcala, Chiapas, Campeche e Hidalgo
Tlaxcala, Tlax. A 22 de mayo del 2022. Redacción.
El estado de Tlaxcala se mantiene como una de las cinco entidades más pacíficas del país, de acuerdo con el Índice de Paz México (IPM) 2022, elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz (IEP). La entidad se ubica en segundo lugar, por debajo de Yucatán y arriba de Chiapas, Campeche e Hidalgo.
En contraste, Baja California se ubicó como el estado menos pacífico por cuarto año consecutivo, seguido de Zacatecas, Colima, Guanajuato y Sonora.
La novena edición del estudio reveló que la paz en México mejoró en un 0.2 por ciento durante 2021 por segundo año consecutivo, después de cuatro años de deterioro.
El IPM se compone de cinco indicadores, calificados entre 1 y 5, donde 1 representa la calificación más pacífica y 5 la menos pacífica, Tlaxcala tiene una calificación de 1.4 en homicidio, 1.3 en delitos con violencia, 1.3 en delitos cometidos con arma de fuego, 1.2 en crímenes de la delincuencia organizada y 3.4 en cárcel sin sentencia.
A nivel nacional, la tasa de homicidios cayó un 4.3 por ciento en 2021, lo que marca la mayor reducción desde 2014, mientras que la calificación de los delitos cometidos con armas de fuego mejoró en un 3.9 por ciento, impulsada por reducciones en asaltos con armas de fuego y homicidios con armas de fuego, cuyas tasas descendieron en más del 6 por ciento cada una.
De igual forma, el estudio refiere que, a nivel subnacional el Índice de Paz Positiva de México (IPPM) de 2020, identificó que las entidades con los niveles más altos en variaciones de resiliencia social fueron Querétaro, Baja California Sur, Aguascalientes, Sonora y Tlaxcala.
Tlaxcala registró el mejor resultado de todos los estados en el pilar de bajos niveles de corrupción con 1.7 de calificación, que es casi la mitad del promedio nacional de 3.2; sin embargo, en ese mismo año la desigualdad social y la pobreza eran altas y contribuyeron a un resultado particularmente débil en el pilar de distribución equitativa de recursos.