Por: Luis Jesus Morales
Alejandro del Valle, presidente de Interjet, se encuentra actualmente en proceso judicial debido a su presunta implicación en un caso de fraude. Aunque Del Valle tuvo la ambición de salvar a la aerolínea, esta empresa fue declarada en quiebra y se encuentra ahora en un concurso mercantil.
El juzgado segundo de distrito en Materia de Concursos Mercantiles arruinará la suspensión de la capacidad de ejercicio de Interjet sobre los bienes y derechos que integran la masa, los cuales serán administrados por el síndico. Se ha ordenado a la empresa ya sus administradores, gerentes y dependientes, que entreguen al síndico la posesión y administración de los bienes y derechos que la integran.
La vinculación a proceso que pesa sobre Del Valle se debe a una querella interpuesta por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) por el pago de impuestos de meses anteriores a la huelga de Interjet correspondientes a 11 millones 952 mil pesos. El director adjunto de la aerolínea y su hijo, Carlos del Valle, aclaró esta situación.
Del Valle también es propietario de Telmark Contact Line, una empresa que ofrece servicios de call center y outsourcing y que estuvo involucrada en una investigación por presunta triangulación de recursos públicos en 2011. En ese año, la empresa se adjudicó un contrato sin licitación de por medio para atender solicitudes de citas médicas, vía telefónica e internet, entre otros servicios para los derechoshabientes del ISSSTE, por 7 millones 634 mil 793 pesos. En 2015, el órgano interno de control del ISSSTE detectó irregularidades en las bitácoras de los servicios proporcionados por la compañía, ubicando 46 mil registros de llamadas telefónicas falsas.
En resumen, la situación actual de Alejandro del Valle es complicada debido a su vinculación a un proceso judicial y la quiebra de Interjet, la aerolínea que intentó salvar. Además, su empresa Telmark Contact Line ha estado involucrada en investigaciones por presunta triangulación de recursos públicos y otras irregularidades.