Por: Luis Jesus Morales
La Franja de Gaza ha sido testigo de una tragedia devastadora, con un saldo de al menos 5,087 personas fallecidas como consecuencia de los bombardeos israelíes en represalia por el ataque terrorista llevado a cabo por el grupo islamista palestino el 7 de octubre. Este ataque anterior resultó en la trágica pérdida de alrededor de 1,400 vidas y el secuestro de 222 personas.
El Ministerio de Sanidad de la Franja ha proporcionado estas cifras, revelando que el 40 por ciento de las víctimas son niños, y el 22 por ciento son mujeres o ancianos. Además, se reporta que 15,273 personas requirieron atención médica desde el inicio del conflicto con Israel.
En las últimas horas, los bombardeos israelíes han cobrado la vida de 436 personas, la mayoría de ellas en la región sur de la Franja de Gaza. Las fuerzas israelíes han anunciado que han atacado más de 320 objetivos relacionados con Hamás y el grupo Yihad Islámica Palestina durante las últimas 24 horas. También informaron que sus tropas han enfrentado a milicianos desde el interior de la Franja, en una zona cercana a la valla divisoria, donde operan desde hace días.
El portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza ha alertado sobre la posible presencia de al menos 1,500 personas atrapadas bajo los escombros como resultado de los ataques aéreos israelíes. Además, se ha destacado que la lista de fallecidos en la Franja incluye al menos 57 miembros del personal médico.
La escalada de violencia también se ha sentido en la Cisjordania ocupada, donde al menos 95 palestinos han perdido la vida en enfrentamientos con las fuerzas israelíes y colonos de la zona.
Estos eventos se producen en medio de la controversia en torno al ataque aéreo al Hospital al-Ahli en Gaza, que ha dejado un saldo trágico y del cual ninguna de las partes se ha responsabilizado por completo. A pesar de las afirmaciones de las autoridades de la Franja que señalan a Israel como responsable de la tragedia, el Ejército israelí argumenta que se trató de una explosión de menor envergadura en el patio del recinto, que estaba siendo utilizado como estacionamiento, y que fue causada por la caída accidental de un cohete lanzado desde las cercanías por el grupo Yihad Islámica.
El portavoz del Ejército israelí reconoció la posibilidad de víctimas entre las personas refugiadas en el edificio, pero afirmó que el edificio en sí no resultó dañado y que las cifras proporcionadas por el Ministerio de Sanidad de Gaza están infladas, aunque no ofreció estimaciones alternativas.