#Columna || 👉🏾 Reviviendo el Viaje en Tren en México
Los trenes en México tienen una historia que se remonta al siglo XIX, el primer ferrocarril se inauguró en 1873, conectando Veracruz y la Ciudad de México.
A lo largo de los años, el sistema ferroviario se expandió, desempeñando un papel crucial en el desarrollo económico del país al facilitar el transporte de mercancías.
Durante el siglo XX, el gobierno mexicano nacionalizó los ferrocarriles en 1937, creando la empresa Ferrocarriles Nacionales de México (FNM).
Sin embargo, en 1995, el gobierno inició un proceso de privatización, vendiendo la mayoría de las líneas a empresas como Ferromex y Kansas City Southern de México.
Las ventajas de los trenes en México incluyen la eficiencia en el transporte de carga a larga distancia, reduciendo la congestión en carreteras. Además, el ferrocarril ha sido vital para conectar áreas geográficas remotas.
Sin embargo, también hay desafíos, como la competencia con el transporte por carretera y los retos en la infraestructura. A pesar de esto, los trenes siguen siendo una parte fundamental del sistema de transporte en México.
Hace unos días el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló planes para revivir los más de 20 mil kilómetros de vías férreas destinándolos al servicio de trenes de pasajeros en México.
Es importante enfatizar que, con este proyecto no solo se busca modernizar la infraestructura, sino también ofrecer una alternativa eficiente y sostenible de transporte para los mexicanos.
Pues así como lo mencionamos párrafos arriba, después de décadas de dejar las vías férreas al transporte de carga, esta iniciativa representa una oportunidad única para revitalizar una forma de viaje que ha sido central en la historia del país durante 150 años.
Del mismo modo, AMLO expresó el compromiso de no expropiar concesiones existentes, mostrando una estrategia inclusiva al invitar a las concesiones actuales a participar en esta transformación.
La preferencia otorgada a quienes ya poseen concesiones de trenes de carga para presentar proyectos refleja la intención de aprovechar la experiencia existente y facilitar una transición eficiente.
Este enfoque pragmático podría acelerar la implementación del servicio de trenes de pasajeros y aprovechar al máximo la infraestructura ya establecida.
El proyecto no solo tiene el potencial de conectar destinos clave, desde Cancún hasta Nuevo Laredo, sino que también se alinea con consideraciones medioambientales al utilizar derechos de vía ya existentes y de esta manera evitando así la apertura de nuevos tramos y la afectación de áreas sensibles.
Sin embargo, queda por ver cómo responderán los actuales concesionarios y qué tan rápido podrán adaptarse a esta nueva visión de transporte.
Finalmente, cabes destacará que la resurrección de los trenes de pasajeros en México no solo representa un paso hacia adelante en términos de conectividad y movilidad, sino también una reconexión con una parte fundamental de la historia y la identidad del país.
El tren, con sus raíces centenarias, podría convertirse en el puente que une el pasado y el futuro del transporte en México.