Dos nuevas especies de tarántulas descubiertas en los Andes podrían enfrentarse a la extinción
Aracnología. A 14 de Abril, 2024. ✍️ Sunashi Rivera
Un reciente hallazgo realizado por un equipo de la Universidad San Francisco de Quito en Ecuador ha revelado la existencia de dos nuevas especies de tarántulas en las laderas de los Andes. Este descubrimiento, publicado en la revista ZooKeys, resalta la importancia de la biodiversidad en la región y alerta sobre las amenazas que enfrentan estas especies debido a las actividades humanas.
Las tarántulas, pertenecientes a la familia de los Psalmopoeus Pocock, fueron encontradas en árboles de la parte occidental de Ecuador. La primera especie, denominada Psalmopoeus cronoarachne, fue descubierta en un bosque al pie de la Cordillera Occidental de los Andes, a una altura de aproximadamente 1,5 metros sobre el suelo. Su nombre científico refleja la vulnerabilidad y el riesgo crítico de extinción que enfrenta debido a la deforestación y la expansión agrícola y minera en su hábitat.
Por otro lado, la segunda especie, llamada Psalmopoeus satanas, fue identificada en el norte de la Cordillera Occidental de los Andes, a una altitud de unos 900 metros sobre el nivel del mar. Esta especie también se ve amenazada por la actividad humana, que contribuye a la degradación y fragmentación de su entorno natural.
Los investigadores destacaron el comportamiento defensivo y rápido de la especie Psalmopoeus satanas, que inspiró su denominación. A pesar de la singularidad ecológica de la región donde fueron encontradas estas tarántulas, que no está dentro de los límites de ninguna reserva ecológica gubernamental, su hábitat se encuentra altamente amenazado.
Ambas especies cumplen con los criterios para ser clasificadas como en Peligro Crítico de extinción, lo que resalta la urgencia de implementar medidas de conservación para proteger su hábitat y evitar la pérdida de biodiversidad en Ecuador.
Los científicos han mencionado la importancia de involucrar y educar a las comunidades locales sobre la conservación de la biodiversidad, así como fomentar la investigación sobre otras especies de tarántulas en la región que aún no han sido descubiertas o documentadas.
Fuente: Infobae.
