Tormenta solar geomagnética pone a prueba los satélites Starlink
Internacional. A 13 de Mayo, 2024. ✍️ Sunashi Rivera
La reciente y potente tormenta solar geomagnética, catalogada como la más intensa en las últimas dos décadas, está desafiando la resistencia de los satélites en órbita, particularmente los pertenecientes a la red Starlink, liderada por Elon Musk y su empresa SpaceX.
Desde el viernes 10 de mayo de 2024, aproximadamente el 60 % de los 7 mil 500 satélites Starlink en órbita alrededor de la Tierra están experimentando dificultades notables debido a este fenómeno astronómico. A través de la plataforma X (antes Twitter), Elon Musk ha informado que aunque los satélites están «bajo mucha presión», hasta ahora han resistido el evento sin experimentar fallos críticos.
El Centro de Predicción del Clima Espacial (SWPC) de Estados Unidos ha clasificado esta tormenta como de nivel 5, el más alto en la escala de actividad geomagnética, lo que no se había registrado desde octubre de 2003. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha emitido alertas sobre los posibles efectos disruptivos de esta tormenta, incluyendo problemas de control de voltaje y perturbaciones en sistemas críticos como GPS, redes eléctricas y navegación satelital.
En México, el Servicio de Clima Espacial (Sciesmex) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha registrado múltiples incidencias asociadas a la actividad solar, incluyendo nueve fulguraciones clase X y múltiples eyecciones de masa coronal que han afectado las comunicaciones por radio de alta frecuencia HF.
Se prevé que los impactos de estas tormentas solares se intensifiquen en los próximos días, afectando aún más infraestructuras y tecnologías. Ante esta situación, se están desarrollando estrategias para mitigar los efectos adversos sobre la infraestructura espacial y tecnológica, incluyendo la mejora en los protocolos de protección de satélites y la implementación de tecnologías más resistentes a las perturbaciones geomagnéticas.
La comunidad científica y tecnológica permanece en alerta, monitoreando de cerca el desarrollo de la situación y ajustando sus sistemas para hacer frente a posibles emergencias derivadas de esta y futuras tormentas solares. La magnitud y la frecuencia de estos eventos subrayan la importancia de la preparación y la adaptación en los sistemas tecnológicos globales frente a fenómenos naturales de gran escala.
Fuente: Dinero En Imágen.