Tormenta solar alcanza el fondo del océano
a 23 de Mayo del 2024. Lizeth Cuahutle
Durante el mes de mayo, la Tierra experimentó la mayor tormenta solar en décadas, con intensas auroras boreales visibles incluso en regiones inusuales como España. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) reportó efectos mensurables pero sin informes de daños graves.
Lo más sorprendente fue que los efectos de la tormenta solar alcanzaron el fondo del océano, detectados por observatorios submarinos de Ocean Networks Canada. A 2.7 kilómetros de profundidad, se registraron perturbaciones significativas en el campo magnético terrestre, oscilando entre +30 y -30 grados, coincidiendo con las auroras más activas y coloridas.
Aunque ninguna tormenta geomagnética reciente ha causado daños graves, una erupción solar lo suficientemente intensa podría afectar satélites, cables submarinos y redes eléctricas, causando apagones masivos. La actividad solar seguirá aumentando durante este y el próximo año, ya que estamos en el máximo solar del ciclo de 11 años del Sol.
La tecnología actual permite monitorear y prever estas erupciones solares, reduciendo el impacto potencial en la civilización. Aunque eventos como pérdida temporal de GPS o estaciones de radio podrían ocurrir, el mundo está preparado para protegerse contra estos eventos.