14 AÑOS DE LABOR HUMANITARIA Y PROTECCIÓN DE DERECHOS HUMANOS DEL ALBERGUE LA SAGRADA FAMILIA DE LA DIÓCESIS DE TLAXCALA EN FAVOR DE PERSONAS EN CONTEXTOS DE MIGRACIÓN FORZADA EN TLAXCALA.
Tlaxcala. A 23 de octubre de 2024 . Redacción
El 18 de octubre de 2024, el Albergue “La Sagrada Familia” (ASAFAM) cumplió 14 años de servicio, proporcionando asistencia humanitaria y protección de derechos humanos a personas que migran de manera forzada, en su tránsito por Apizaco Tlaxcala. El contexto migratorio en este año ha estado determinado por el cambio de las políticas migratorias estadounidenses que se han externalizado hacia México y la región centroamericana, circunstancias que han provocado que las personas migrantes busquen llegar pronto a la Ciudad de México o norte del país para acceder con mayores posibilidades al asilo en el vecino país. Estos cambios han provocado el “estancamiento” del flujo de personas en las fronteras, la saturación de entidades como Ciudad de México y la intención de las autoridades de “desfogar” o “limpiar” estas entidades de presencia de personas migrantes que llevó a trasladarlas bajo engaños a otros puntos del país, dejándolos en mayor desprotección.
Otros efectos de estas políticas han sido los consecuentes cambios del flujo de personas en las rutas migratorias, algunas se saturaron, otras presentaron menor flujo. Sin olvidar que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados redujo su operación ante el cierre temporal de algunas de sus oficinas centrales, dejando en desprotección a personas refugiadas.
En Tlaxcala el Instituto Nacional de Migración ha incrementado sus acciones de detención migratoria bajo el eufemismo de “rescates humanitarios”, trayendo consigo una disminución significativa del flujo de personas que han transitado por esta ruta migratoria que conecta el sur del país con el centro de México. A pesar de que en este año la estación migratoria provisional que operaba en Tlaxcala continúa suspendida, se sigue deteniendo a las personas que transitan por nuestra entidad en condiciones migratorias irregulares. En dichos operativos de detención las autoridades migratorias y de seguridad que intervienen siguen incurriendo en uso excesivo de la fuerza, abuso de autoridad, perpetrando actos violentos, incluso tratos crueles e inhumanos, lo que ha provocado que algunas personas en su intento por evitar estas detenciones pongan en riesgo su vida
Nos preocupa que estas políticas de contención han provocado que el tráfico de personas crezca pues las personas en su intento por cruzar el país y evitar su detención quedan expuestos a estas redes. Al respecto, según fuentes hemerográficas, durante 2023 en territorio tlaxcalteca el INM “rescató” a 858 personas en diversos operativos de aseguramiento de personas en condiciones de probable tráfico de personas; las mismas fuentes reportan que en lo que va de 2024 este número ha ascendido a por lo menos 1,233 personas “rescatadas” en al menos 8 municipios, entre ellos, Cuaxomulco, Tzompatepec, Apetatitlán, Ixtenco, Xaltocan, Nanacamilpa, Apizaco y Tenancingo. Estas referencias pueden ser un indicativo del aumento del tráfico de personas en Tlaxcala y su posible vínculo con otro grave problema, la trata de personas para la explotación sexual.
Las personas migrantes han buscado alternativas para migrar de forma más segura, a través de la integración de caravanas de migrantes en su intento de protegerse tanto de la violencia criminal como de la violencia institucional, de esta forma, en Tlaxcala, al menos 3 caravanas de alrededor de 200 personas cada una han intentado cruzar por nuestra entidad en mayo, septiembre y octubre respectivamente, dos de estas caravanas fueron víctimas de violencia, tratos crueles y de violaciones a derechos humanos por parte de las instituciones involucradas en su intento de detenerla, en tanto que la última que transitó a inicios del mes de octubre fue detenida bajo engaños de las autoridades involucradas. Cabe resaltar que, si bien el gobierno del estado de Tlaxcala puso en marcha el denominado “protocolo interinstitucional de identificación, detección y atención a personas migrantes”, nos preocupa que dichas autoridades utilicen este protocolo para legitimar prácticas orientadas a la detención migratoria.
En este contexto de enero a septiembre de 2024 el flujo migratorio por el albergue disminuyó, de tal manera que la atención prestada ha sido de 1,426 personas. Esto significa un promedio de 158 personas atendidas por mes. Al respecto, el mes con más personas atendidas fue agosto con 189 personas, en tanto que el mes con menos personas fue enero de 113. Si consideramos que de enero a septiembre de 2023 el número de personas atendidas fue de 2909, podemos corroborar una reducción del 50% en cuanto a personas que acuden al albergue a utilizar los servicios humanitarios. Esta situación preocupa ya que los operativos de detención migratoria y el tráfico de personas impiden que las personas accedan a atención humanitaria, poniendo en riesgo su integridad.
Si bien el número de personas ha disminuido en este año, se ha diversificado el número de países de origen, por lo que en este año 2024 tenemos que las 1,426 personas proceden de 18 países. De estos 18 países de procedencia, 5 corresponden al continente africano. Esta diversificación multiplica las necesidades de asistencia humanitaria. La población hondureña sigue representando el primer lugar de personas atendidas con poco más del 74% seguida de la población guatemalteca con 6.87% seguida en tercer lugar por la población venezolana con 5.32 %.
En relación con las personas que han utilizado los servicios del albergue según su identidad de género, a la fecha el 92% han sido hombres y 8% mujeres; en términos porcentuales la presencia de mujeres en el ASAFAM aumentó al menos tres por ciento en relación con los datos de años pasados.
En cuanto a personas en condiciones de mayor vulnerabilidad que han utilizado nuestros servicios, en lo que respecta a niños, niñas y adolescentes (NNA) de las 1,426 personas atendidas en total, 57 corresponden a menores de 18 años, lo que representa el 3.9 % del total de la población. Este porcentaje de menores de edad ha disminuido con relación a 2023, pues en este año anterior se atendió 5% menores. Del total de NNA atendidos, 35 son varones y 22 mujeres, 18 viajaban no acompañados (17 hombres y 1 mujer).
En materia de servicios humanitarios utilizados por las personas migrantes y refugiadas que han acudido al ASAFAM de enero a septiembre de este año, 799 personas han recibido atención médica diversa, lo que representa un 56% del total de la población atendida. 51 personas que recibieron atención médica se encontraban en un rango de edad de 0 a 18 años. El 87 % de las mujeres que acuden al albergue obtienen atención médica para protección de su salud.
En materia de atención jurídica, en lo que va de 2024 hemos registrado 2070 asistencias a sesiones informativas en temas jurídicos, 383 personas han obtenido orientación en tema de refugio, 26 personas han conseguido acompañamiento jurídico en materia de protección internacional. 43 personas que han sido víctimas de delito han obtenido asistencia jurídica para su protección y acceso a la justicia. En el mismo sentido, 26 personas que fueron víctimas de violaciones a derechos humanos obtuvieron orientación o acompañamiento jurídico. 13 personas obtuvieron asistencia jurídica del albergue lo que les permitió que el INM les expidiera sus correspondientes tarjetas de visitante por razones humanitarias como solicitantes de la condición de refugiadas. En el mismo rubro 4 personas, mediante el apoyo jurídico del albergue pudieron obtener su regularización migratoria permanente.
En materia de atención psicosocial, en lo que va de 2024, 442 personas han obtenido apoyo a través de acciones como talleres informativos y de autocuidado, primeros auxilios psicológicos, sesiones únicas. 9 niños, niñas y adolescentes han obtenido asistencia psicosocial durante su estancia en el albergue. 9 personas han sido canalizadas con empleadores para favorecer su integración temporal.
En el marco de este aniversario de actividades nos pronunciamos por:
● Que el Instituto Nacional de Migración se abstenga de prácticas violentas durante los operativos de detención migratoria y garantice el trato digno y respetuoso de los derechos humanos de las personas que son detenidas por su condición migratoria irregular en Tlaxcala.
● Que la implementación por parte de las autoridades estatales y municipales del protocolo interinstitucional de identificación, detección y atención a personas migrantes, no se utilice para legitimar prácticas que tengan como principal fin la detención migratoria. Y se concreten acciones que privilegien efectivamente la garantía, protección y promoción de los derechos de las personas que migran.
● Que gobierno, academia, sociedad civil, iniciativa privada y otros actores sumemos esfuerzos para promover en Tlaxcala una cultura de paz, de respeto a la diversidad, de inclusión e integración y de cuidado hacia las personas que enfrentan condiciones de mayor vulnerabilidad, para superar cualquier práctica de discriminación, racismo y xenofobia porque “se trata de migrantes” y de no excluir a nadie”.