México frena avance de nueva caravana de unos mil migrantes
CDMX/ 6/06/2019
El Gobierno de México cerró el paso a unos mil migrantes centroamericanos que caminaban por el estado de Chiapas con destino a Estados Unidos.
Hasta la carretera cera del municipio de Metapa, ubicado a unos 18 kilómetros (11 millas) de Tapachula, arribaron unos 200 elementos de la Policía Militar y Federal, así como de las agencias de Migración, quienes cerraron el paso, lo que generó un caos.
La caravana de migrantes, en el que se encontraban muchas mujeres y niños, salió temprano de Ciudad Hidalgo en la frontera entre México y Guatemala y se dirigió a Tapachula.
Según los reportes, los agentes no portaban armas y aseguraron que tenían órdenes de pedirle a los migrantes subir a autobuses para llevarlos a un campamento en las afueras de dicho municipio que ha sido usado para registrar y alojar a migrantes.
La agencia AP hace notar que en recientes meses, México ha lanzado redadas y ha establecido puntos de control vial para desalentar las marchas masivas de migrantes como las que ocurrieron en 2018 y a comienzos de 2019.
El presidente de EU, Donald Trump, recientemente amenazó al país con imponer aranceles sobre productos mexicanos a menos que México tome más medidas para frenar el flujo de migrantes atraviesa su territorio.
Ante esta amenaza, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, se encuentra en Washington negociando una salida al tema de los aranceles.
El año pasado, miles de migrantes comenzaron a viajar desde Centroamérica hacia el norte en caravanas que iban ensanchándose a media que atravesaban México, lo que generó la irritación de Trump.
Los migrantes han dicho que caminan en caravanas porque es una manera más segura de trasladarse y les evita tener que pagar cuantiosas sumas a contrabandistas.
Sin embargo, esos contingentes son apenas una fracción del flujo migratorio normal, aunque se han convertido en símbolo de lo que el magnate califica como una crisis en la frontera entre México y Estados Unidos.
Si bien, las primeras caravanas fueron recibidas con agrado en poblados del sur de México, a medida que avanzaban, otras comunidades se quejaban de que no tenían los recursos para cuidarlos.
Muchos migrantes dicen que huyen de la violencia, las extorsiones y la corrupción endémica de Guatemala, Honduras y El Salvador.
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A ello se suma una devastadora sequía ha estado afectando a partes de la región, especialmente las áreas rurales.
Si bien México les ha ofrecido opciones para quedarse legalmente en su territorio, la mayoría prefiere cruzar a Estados Unidos donde pueden ganar más dinero o reencontrarse con familiares.