TLAXCALA/20/02/2020/Pedro Morales/ Fotografía de Jorge Lezama
Impresionante fue el desfile por las principales calles de la ciudad capital con la participación de alegres y espectaculares camadas provenientes de los cuatro puntos cardinales contando, con la asistencia de miles de espectadores de todas las edades y familias completas.
Como cada año y en completa la libertad en las formas de expresión, colorido, música y alegría, este jueves dieron inicio con la coronación de la Reina del Carnaval que precedió a este desfile las festividades del tradicional Carnaval de Tlaxcala 2020 que inició la camada espectacular de San Francisco Tlacuilhocan.
Se tiene calculado que asistan más de 500 mil visitantes durante los seis días que se desarrollará esta festividad que concluirá el 4 de marzo próximo, y que se celebra en los 60 municipios y en las comunidades del estado.
El carnaval es una festividad y tiene como significado la representación del adiós a la carne derivada de las actividades previas al inicio de la cuaresma.
Los indígenas tlaxcaltecas bailaban y ridiculizaban las fiestas de los ricos hacendados españoles en las principales calles, plazas y atrios de las iglesias como protesta a la discriminación que sufrían, el carnaval fue introducido en Tlaxcala por los colonizadores españoles aproximadamente desde el siglo XVII.
Las danzas y música de carnaval fueron creadas por los indígenas tlaxcaltecas a partir de la asimilación que hicieron de los bailes y música llegados de España entre los siglos XVI y XVII. .
Las danzas tlaxcaltecas de carnaval, a pesar de ser distintas entre sí, tienen dos características en común. En primer lugar son satíricas, pues los participantes hacen mofa de las clases altas de distintas etapas históricas del Estado a través de la indumentaria y las máscaras de madera tallada que portan los bailarines (artesanía originaria de la población tlaxcalteca de Tlatempan), así como en algunos pasos coreográficos.
En segundo lugar, poseen un fuerte carácter religioso, resultado de la mezcla de los pensamientos filosóficos cristiano e indígena nahua. Además, muchos grupos de bailarines solicitan misas católicas justo antes de que comience la celebración para pedir permiso a Dios y ofrecerle las danzas, costumbre heredada de la religión prehispánica.
En Tlaxcala las festividades parecen instantes, como la llegada de los reyes magos con su carga de juguetes y alegría; la tamaliza de la Candelaria y ya estamos en pleno carnaval, con su carga emotiva de cultura, tradiciones y relajo, en el que muchos hombres se visten de mujeres, seres fantásticos cobran vida y Tlaxcala se convierte en una fiesta.
Cabe destacar que esta temporada de cuaresma, también nos lleva por el rescate de nuestra cocina tradicional, con platillos muy tlaxcaltecas de temporada.
Como no se come carne, el pescado está por las nubes resurge el ingenio de las abuelas al cocinar esas ricas tortitas de papa, de arroz, de haba con sus romeritos y nopales.
El pescado seco, el mole negro de polvo de huitlacoche allá por Xaltocan, el mole prieto y sus espectaculares y gigantescos cazos en Contla y Chiautempan, los frijoles negros con pescado, los chiles rellenos con queso y el ingenio de nuestras madres de familia se agudizan.
Con este desfile se puso de manifiesto la alegría y pujanza de las nuevas generaciones, que desde chiquitos le agarran gusto al baile del carnaval, la música y la convivencia entre los integrantes de las cuadrillas es evidente.
Lo que parece fácil, no lo es tanto, la presentación de todas y cada una de las cuadrillas tiene su grado de dificultad, para la organización y los ensayos, ya que nada es improvisado.
Ni se diga de los gastos que como en el caso de los huehues de Tlauilohcan y sus enormes penachos elaborados con plumas de gallo, avestruz faisán, cóndor o águila superan en ocasiones los cien mil pesos.
Ni se diga de sus trajes elaborados con figuras a base de diminutas chaquiras, canutillo, lentejuelas y cascabeles que se elaboran por las manos mágicas de nuestros artesanos.
Las danzas y contradanzas son repasadas una y otra vez, hasta dominar el baile, que además de ritmo y sabor, lleva a la creatividad y gracia de las parejas, algunas dignas de presentarse en cualquier escenario del mundo.
Para el visitante, es más cómodo acudir al centro de Tlaxcala o de cualquiera de los municipios, para observar a las camadas, algunas de ellas muy grandes, como las del sur de Tlaxcala.
Pero hay la posibilidad de organizar rutas, que pueden llevar en lo que resta del carnaval a tener más conocimiento y poder apreciar los distintos estilos y espectacular vestuario de los integrantes de las camadas.
LA MADRE DE TODAS LAS CAMADAS
Se podría iniciar en la zona de Totolac, donde existe la llamada “Madre de todas las camadas”, la de “Nuestra Señora de las Nieves”, que es sin duda una de las más auténticas de Tlaxcala.
La vestimenta, es muy elaborada, donde destaca el color blanco y sus coloridos bordados, en las mujeres significa un honor pertenecer a esta cuadrilla, por la autenticidad de sus danzas.
Destaca la danza de la garrocha, que consiste en cruzar listones alrededor de una vara, para luego destejer en lo que se convierte una danza espectacular.
Mención aparate merece la interpretación de “La Jota”, con su ritmo cadencioso tiene su culminación en que se baila por una pareja, la mujer poco a poco dobla su espalda hacia atrás, hasta lo más que pueda y deja una estampa de agilidad y belleza inigualables.
LA ESPACTACULARIDAD EN LA ZONA SUR
No hay espacio para enumerar todos y cada uno de los grupos, pero en Zacatelco se pueden admirar a los chivarrudos, huehues que danzan sobre un caballito de madera, con sus polainas de piel de chivo y hasta el olor es muy penetrante, como lo son sus frases y dichos.
De ahí hay que llegar a Tepeyanco y Papalotla, es impresionante admirar a los charros, que con sus espectaculares trajes primorosamente bordados y sobre todo sus inigualables sombreros llenos de plumas de avestruz, sus capas coloridas y su látigo que estrellan en el oponente, y hacen chasquear para imitar al trueno que merecen ser llevados al celuloide para mostrarse por el mundo.
LOS CATRINES DE CHIUTEMPAN Y CONTLA
Una visita ineludible significa asistir al carnaval de Chiautempan y de Contla, por esos rumbos hay camadas muy tradicionales con sus huehues muy elegantes, ataviados con sus trajes de levita, paraguas y sombreros altos.
Es un carnaval alegre, diferente y muy participativo, ya que en todos y cada uno de los barrios se esmeran por agradar a la gente, luego participan en el concurso estatal, pero lo bueno es el concurso de camadas local, ahí es donde se desbordan las emociones.
No faltan las camadas de “las locas”, son muy buenos sus integrantes, pues el relajo de vestirse de mujeres, es solo una parte ya que los integrantes de las camadas realizan su mejor esfuerzo.
En todos los casos, en los municipios en el carnaval participan y se amalgaman los estratos sociales, de ahí que campesinos, obreros y hasta profesionistas, cada año se incluyen en las camadas, por gusto y tradición.
LA MAGNIFICENCIA DE LOS PENACHOS DE YAHUQUEMEHCAN
Vale la pena rematar este viaje de carnaval por Tlaxcala en tierras de Yauhquemehcan, hay que preparar cámaras y celulares, se trata de la región en donde danzas las camadas más espectaculares
Los penachos que han sido ideados en esta región, son únicos en el mundo, y en Tlaxcala son admirados por sus dimensiones, ingenio y elegancia, en fin que esta es una sugerencia.
LO ORIGINAL EN TOLUCA DE GUADALUPE
Depende el tiempo con que se cuente, pero también vale la pena visitar el carnaval del oriente del estado, sobre todo en Toluca de Guadalupe, donde la danza de los negritos con sus cuchillos y grado de dificultad, han llamado la atención más allá de nuestras fronteras.
El visitante que llega a Tlaxcala, tiene la garantía de que por donde se pare, sin duda, va a toparse con una camada, o hay que seguir la música de lejos y se dará con los danzantes, es gratis, hay que armarse de paciencia y solo es cuestión de agarrarle el gusto y con la seguridad de que en Tlaxcala seguro ¡ESTARÁS FELIZ!.